«La esperanza de vida de cada generación es mayor a la siguiente, por eso la longevidad se convierte en un fenómeno digno de estudio que no tiene límite. Las implicaciones de las tendencias observadas son enormes desde todos los puntos de vista, sobre todo desde el social, financiero y económico, interpelando a los mecanismos convencionalmente utilizados para la cobertura del riesgo de longevidad convencionalmente utilizados»
El pasado 02 de febrero el socio de Afi José María Herce dió una conferencia titulada Longevidad: tendencias y aseguramiento
Se introducen varias ideas que afectan a la política y a nuestra propia planificación financiera.
Para empezar veamos la pirámide población española actual
(fuente imagen: pablo profe)
Sólo mirando la gráfica salen varias ideas:
Aumentará el número de gente que puede vivir cerca de 100 años lo cual es un motivo de orgullo. Pero esto y la aproximación a la edad de jubilación de la generación del baby-boom que acaba con los que tenemos de 40 a 44 años pone a las siguientes generaciones en no poder atender un sistema como el que tenemos ahora de reparto. Y aunque hay formas muy claras de superar esos límites como la mejora de productividad o la inmigración, al menos vale la pena poder reflexionar a nivel colectivo.
En la coferencia se exponen además varios retos para la sociedad
Las empresas deben gestionar la presencia de un personal cercano a la edad de jubilación o incluso que la ha superado. Aunque está claro que la tendencia de las empresas es a deshacerse de ese personal que puede tener unas condiciones salariales mas elevadas y lo sustituye por otro más jóven y barato. En un futuro para cubrir las necesidades de trabajo igual es mas barato retener a los seniors que intentar formar . O se pueden establecer formas de alargar esa vida laboral si el tipo de trabajo lo permite. Si un presidente de una compañia, de la que no es dueño, puede ser presidente hasta los 70 años, también puede colaborar un trabajador.
Los sistemas de seguros y de planes de pensiones deberán recoger en sus cálculos la posibiliadad de que cada vez se podrá vivir más y que hay que asegurar esos costes. Sobretodo los que esten ligados a la dependencia.
La propia responsabilidad de guardar para cuando seamos mayores y más allá. Hasta ahora lo que no se ha cubierto con la Seguridad Social se ha cubierto con el esfuerzo de la familia. Pero no está de mas que nos podamos hacer una planificación a muy largo plazo para poder afrontar esa etapa de la vida. Hay muchos forma de ahorrar, no solo están los planes de pensiones. La cultura del pisito, el ser propietarios de la propia vivienda en ese momento de la vida, es una de las formas mas importantes de ahorro. Que no acabará con ella ni la burbuja inmobiliara pasada, ni otra que pueda llegar.