Todas las operaciones realizadas por los sujetos pasivos en el ejercicio de sus actividades empresariales o profesionales deberán contabilizarse o registrarse dentro de los plazos establecidos para la liquidación y pago del impuesto.
La contabilidad deberá permitir determinar con precisión:
- El importe total del IVA que el sujeto pasivo haya repercutido a sus clientes.
- El importe total del impuesto soportado por el sujeto pasivo.